Una de mis amigas sufre y la neta no sé que hacer.
Resulta que un buen día se le ocurre tener un hijo con un hijo de zorra que solamente le da 20,000 pesos y con eso liquida su problema. Vamos ni siquiera tuvo la cara para decirle que no quería saber nada de ella.
Mi amiga en cuanto supo que estaba en Barandales, le avisa a su amor la situación, esa fue la última comunicación que tuvieron ambos. Un amigo de él le lleva en una bolsita de papel (como las que usan para el pan) los 20,000 pesos que le iba a dar y con eso acababa su responsabilidad.
Ella se hace fuerte, tiene mucho apoyo de sus amigos y de sus papás principalmente, tiene a su hija y todo transcurre con normalidad. Nunca ha vuelto a tener contacto con el tipo y ni falta que le hace. Supuestamente él se aleja porque proviene de una familia de “alcurnia” y no quiere manchar el apellido con un hijo fuera del matrimonio. Qué pendejo, me cai.
Total que ahora ella se encuentra a un nuevo galán mismo del que me dan referencias que es borracho, parrandero, mujeriego y jugador. Tal y como en las películas de Pedro Infante.
Todo va muy bien a un año de relación pero el problema es que se pone hasta la madre el galán y cuando le ocurre eso le da por ir a buscar a su amor y como no le abre la puerta, pues se queda dormido en la entrada de su casa. A veces hace escándalo, a veces no, total, todo un estuche de monerías.
Obvio, todos los vecinos murmuran del borrachito que se consigue mi amiga como galán (ya de por si se la comieron por ser madre soltera) y de piruja-puta-prostituta-cachuchera-zorra-chupapijas-calientacamas no la bajan.
Total que ya todos sabemos que el susodicho tiene otra nueva pareja (aquí entre nos está muy buena, eso que ni qué) y a mi amiga ya ni la pela. Claro, como sucede siempre, ella no sabe (no sabe o no quiere enterarse) porque todos ya lo sabemos. Pero no hay peor ciego que el que no quiere ver que sucede alrededor.
Le he dicho qué es lo que le ve al tipo que siempre anda borracho y me dice “es que cuando anda borracho aguanta un chingo en la cama”.
No encuentro argumento para rebatirle su esperanza.
Qué mas le puedo decir?