Nuevos miembros de la Comunidad Lolísmica

Se abre la sesión...

Uno de los múltiples y pendejos problemas del mexicano es que no lee.

Leer en el amplio sentido de la palabra, lo mismo son periódicos, libros, revistas, es más ni tan siquiera el pinche Libro Vaquero que tan buenos momentos me hace pasar en mis visitas al baño. El mismo presidente Fox se alegra cuando dice que no lee periódicos porque le amargan el día. Qué pendejo. Es un problema complejo que tiene tan fácil solución.

Conozco gentes que me confiesan, algunas sin rubor otras con cierta pena, que nunca han leído un libro completo. O lo han empezado y les da hueva terminarlo o simplemente no les parece sano leer una pinche hoja. Incluso han llegado al extremo de rentar la pinche película con tal de evitarse leer siquiera una hoja. Ah¡¡¡ pero no fuera el pinche TVNotas porque hasta memorizan los detalles de las pendejadas que ahí dicen. Lo malo que lo ahí expuesto no es literatura, vamos, ni siquiera llega a reportaje periodístico.

Sin embargo existen gentes que ni siquiera planean leer un libro en su puerca vida, pero eso sí, leen como 20 blogs diarios, qué buscan dejando un pendejo comentario en el TAG como Saluditos¡¡¡? Yo creo que nada. Para ellos los blogs es lo máximo, tan así se convierte su pinche obsesión que se vuelven esclavos de BlogsMexico y emiten pings cada 5 minutos solo para que entremos a ver sus pendejas letras que dicen: “Hoy no tengo ganas de escribir”.

Para eso tanto pedo?

Existen blogs en los cuales alguien pone “Hoy me siento triste” y uno puede leer la infinidad de comentarios que colocan pendejos que hacen toda una reflexión sociológica, tesis doctoral de un pinche comentario que no venía al caso y que el tipo que lo puso fue porque su pendejo cerebro no da para más.

Reflexión: No hay que tomar nada en serio en este mundo.

Esto me recuerda a cierta vieja pendeja que llegó a la redacción a pedir chamba, la pusieron a mis órdenes, la muy pendeja no entendió bien a bien si iba a trabajar conmigo o iba a estar a mis órdenes. Cuando me ve y reflexiona que un pendejo de 22 años, sin estudios de periodismo y que trabajaba de medio tiempo iba a ser su jefe empezó a joderme desde el primer día. Al final de su día no acababa su trabajo y yo tenía prisa por irme a dormir. La llamé a mi oficina y le dije: si quieres publicar conmigo tienes que terminar tu trabajo bien y a tiempo. Acaba tus notas, mándamelas por fax a mi casa y te las regreso corregidas para que se metan en la edición de mañana.

Pinche vieja pendeja, no solamente no las envió, sino que al día siguiente no regresó a trabajar. Se fueron a la verga sus pinches 10 años trabajando en la revista Contenido que cacareaba a cada rato y que al final del día hasta los pinches polis de la entrada sabían que publicó como 500 reportajes en la mencionada revista. Todo eso valió verga porque no supo trabajar bajo las órdenes de alguien que (en ese momento) era mejor que ella. Ni pedo. Y creo que lo sigo siendo.

Por eso, la pinche vieja de cuyo nombre no me acuerdo y que me vale madres donde esté, se va directamente al Comité de Bienvenida de la Comunidad Lolísmica donde la mandarán a chingar a su madre como se merece.

Se cierra la sesión....

El Tío Lolo descansa....